...أتمنى أليس من شأن كل شيء حيال خطر لك أن هذا غريب

Siempre que conozco a alguien hago todo lo posible por decir desde un principio "soy un asco de ser humano". No es ningún acto de self-pity, sólo lo estoy informando.

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Conclusiones de los últimos días:

● No puedo evadir al mundo encerrándome en casa y viendo series, si las series que veo siempre me recuerdan lo que tengo que arreglar.
● Amo y desprecio mi horario nocturno. Puedo hacer mucho más cosas, pero de pronto las horas se me hacen eternas y todo lo que pueda pensar se pierde en la nada. Recuerdo con eco horrendo las palabras de Liliana al decir que cómo podía soportar vivir sin tener una conversación con alguien. Pierdo mi escasa habilidad social, me pongo ridículamente irritable. Necesito dejar esto, otra vez.
● Cheap Girls records, instant Netflix.
● Siempre es lo mismo. Una imagen de irrealidad y me pierdo en ella. Discos viejos, melodías pegajosas, letras idiotas. Mínimo una vez al año.
● Siempre se puede deducir mi estado de ánimo en relación a los contenidos de mi iPod. Hasta este fin de semana podía presumir que estaba en su mejor estado en años, sin nada comprometedor, todo lleno de cosas geniales que me llevaban día a día tranquilamente. Ya se fue todo al diablo. Cuando vuelvo a meter montones de canciones de Green Day, MxPx y Reggie and the Almost Forgotten Feelings nada bueno puede venir.

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Desde que inició este semestre me prometí entrar a clases de dibujo con algún grupo de nuevo ingreso. Soy un asco, así que no lo hice inmediatamente.
Ayer, rompiendo (afortunadamente) mi idea de fingir demencia y esconderme del mundo viendo todos los estrenos de la temporada de otoño, decidí finalmente hacerlo. Llegué temprano, pedí permiso al maestro y entré a sentarme en un rincón. No había modelo, así que empecé dibujando lo único que he tenido en la mente durante días. Una monita llegó a sentarse a un lado y mantuvo conmigo lo que fue la primera conversación real desde el domingo. Me dio una barra de carbón y un pincel para seguir dibujando. De la nada, trazos que salían casi solos, ninguna idea de como terminaría todo, sólo dibujar, dejar agua caer en el papel, esperar que todo saliera como lo imaginaba. Perfección absoluta y alegría inmensa, es el mejor momento que he tenido en semanas.
Reafirmación total, no hay lugar mejor para mí.

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Hoy es septiembre 22. Uno de esos días en los que (ridículamente) creo que puede haber circunstancias increíbles para alegrar mi vida.
En un día como hoy, mi único objetivo del día es permanecer despierto.