Primer entrada.

Las primeras entradas de un blog rara vez son brillantes. Esta, obviamente, no será una de esas raras veces.

Hace unas semanas, Yaz (Jaz, Llaz o como se escriba), un amigo de la escuela, me dio un DVD y me pidió que en él grabara "los discos y canciones más importantes de tu vida"... o algo así entendí yo. Entonces llegué a casa y comentándolo con Carolina me dí cuenta de que no podía dar "los discos más importantes de mi vida" sin explicar el porqué de ello. Ejemplificando, si metía El Viaje de Copperpot, tendría que explicar que hace un jodido disco de pop ahí... lo cual es una pregunta clásica. Así pues, me decidí a escribir pequeñas notitas del porqué de cada disco. Fue una gran idea, hasta que me dí cuenta de que no iba a terminar jamás.

Entonces, explorando las posibilidades, recordé que había creado este blog hace un par de meses, con la intención de usarlo para hablar de música. Así pues, matando dos pájaros de un tiro, le damos la inauguración.

Con un header más ridículo el título de esto, la foto del gorrito de papel que adorna mi perfil o las canciones de Ms. Duff que saldrán algún día en el radio de aquí a lado, le doy inicio a esto, esperando satisfacer un rato de ocio del visitante mientras comparto (sin fines de lucro, actitud de "vamos a joder a las disqueras y sus precios altos" o similares) un poco de la música que más ha cambiado mi manera de ver o vivir en este mundo y las historias de porqué se ganó esa clasificación.