c'est fini

Es realmente curioso como las cosas cambian. Horrendo, ¡claro!, muchísimas veces. Tengo esa manía terrible de buscar detallitos en todo, ya lo he dicho antes. Me gusta creer que cada cosa es parte de un todo, que todo lo que pasa tiene una razón y que las acciones de la gente (aunque no lo parezca) tienen un significado oculto en su subconsciente. Manías mías, lo sé.

Hace un año era feliz, Ayer le decía a Xiquez mientras sonaba Como Un Fan a alto volumen y yo tocaba Don't Panic (o lo que algún día será Don't Panic) en una guitarra acústica olvidada, en casa de Oscar. Hace un año era feliz y al llegar a esta casa me sentí mal, horrendamente mal. Sentía que estaba tan lejos, que era tan ajeno a ustedes, que todo lo que alguna vez tenía sentido no existía aquí ya... y hoy, que llevo tanto hundiéndome a mí mismo en esta miseria ridícula, al estar aquí escuchando esta música que estúpidamente cobra sentido, con cientos de ideas viniendo y uniéndose de forma tan perfecta, ustedes aquí. Me siento tranquilo. Comencé a decirle mientras comenzaba C'est Fini y escribía en una servilleta, ya que mi brazo no alcanzaba para seguir anotando las ideas que llegaban.

Estuve hablando mucho tiempo, lo cual es bastante raro pues los que me conocen saben que el hecho de que me ponga a hablar de lo que siento es algo que sólo hago en momentos de verdadera confianza o necesidad, pero lo hice. Sobre lo que pienso, como veo la vida ahora, el análisis de un futuro que sé que no llegará. If you lost it all, and you lost it all, we will still be there when the war is over. Lo que ahora creo y porqué lo hago. Los errores que veo y lo que sé que vendrá... principalmente, el ridículo optimismo con el que lo veo. Es raro decirlo, pero a pesar de no tener nada y de estar más perdido de lo que pude creer que estaría, siento que estoy haciendo lo correcto. Y al final, aún creo que eso es lo que más importa.

No pude dormir, no llegué a mi casa. Tuve una ridícula plática bastante agradable en una sala de cine vacía, una caminata genial en las calles de otro pueblo no tan perdido y un interrogatorio bastante directo, con frases que de una u otra forma me hicieron traer varios recuerdos que afortunadamente cada vez lastiman menos. Me lo hicieron notar, la ansiedad aún existe y no se puede ocultar, lo sé. Pero ya me he dado cuenta de que momento a momento, de una forma o de otra, esto ha de terminar.